Ha pasado mucho tiempo desde aquel 10 de noviembre del año pasado, pero finalmente llegamos a las puntadas finales de este topiario. Fue muy lindo bordarlo. Cansador, a veces tedioso, pero tan hermoso a la vez que el verlo avanzar me daba ese empujoncito que faltaba. Y, como para no tener excusas y abandonarlo, ni siquiera pensé en hacer otra cosa.
La cuestión es que lo terminé!!!!! y este es el resultado...